MANIFIESTO DEL PSOE
El 31 de octubre no es una fecha elegida al azar. Hace 46 años, en este mismo día, las Cortes Generales aprobaron la Constitución de 1978. Esta Constitución, refrendada por una amplia mayoría de los españoles, marcó el inicio de una nueva etapa de paz, libertades y convivencia, que hoy celebramos.
Gracias a la Ley de Memoria Democrática impulsada por este Gobierno, hoy, 31 de octubre, también es un día de recuerdo y homenaje a todas las víctimas del Golpe de Estado y de la Guerra Civil, y a todas aquellas personas que sufrieron violencia, represión y persecución durante la Dictadura y hasta la entrada en vigor de la Constitución. Estas víctimas son el pilar de una historia y una memoria que son esenciales para fortalecer nuestra democracia. La democracia se enriquece cuando incluye más voces, y muchas de estas voces fueron silenciadas. Con este día, hacemos nuestra democracia más fuerte.
Hasta la fecha, se han llevado a cabo más de 5.600 exhumaciones y se han emitido 572 declaraciones de reconocimiento y reparación a personas que, durante la guerra civil y la dictadura, padecieron persecuciones, condenas, sanciones u otras formas de violencia personal por razones políticas, ideológicas o de creencia religiosa.
Para los y las socialistas, la memoria democrática es imprescindible para construir una sociedad equitativa, inclusiva y respetuosa de los derechos humanos. Esta memoria no solo representa un compromiso ético con las víctimas del pasado, sino que también es vital para prevenir la repetición de las atrocidades y abusos ocurridos en épocas oscuras de nuestra historia.
Desde el PSOE, abogamos por el reconocimiento y la reparación de las víctimas de la dictadura franquista y la Guerra Civil española, promoviendo la exhumación de fosas comunes y la identificación de los desaparecidos. Además, consideramos esencial la educación sobre estos periodos históricos para que las nuevas generaciones conozcan la historia y comprendan la importancia de la democracia y los derechos humanos.
Del mismo modo, invitamos a la sociedad civil a participar activamente en la
construcción de la debida memoria democrática inclusiva y representativa,
asegurando que este esfuerzo colectivo fortalezca nuestra democracia. Porque
solo a través de la memoria y el reconocimiento podemos asegurar un futuro de
paz y libertad para todos y todas.